Huevos a más de $1000: ¿cómo hacerlos en casa junto a los chicos para estimular su creatividad?

Los huevos de Pascua son una tradición que se celebra en muchos países durante la temporada de Semana Santa. Se trata de huevos decorados, generalmente de chocolate, que se regalan como parte de la celebración de la Pascua.

La tradición de los huevos de Pascua se remonta a la antigua Roma, donde se intercambiaban huevos decorados como símbolo de la primavera y el renacimiento. Con el tiempo, esta tradición fue adoptada por la iglesia cristiana y se convirtió en una parte importante de la celebración de la Pascua.

Hoy en día, los huevos de Pascua se pueden encontrar en todas partes durante la temporada de Semana Santa, y vienen en una variedad de formas y tamaños. Muchas personas también disfrutan de la tradición de esconder huevos de Pascua para que los niños los encuentren como parte de la celebración.

Ya empezaron a aparecer los huevos de pascua en las góndolas: la gran mayoría de las opciones comienzan en los mil pesos. Una opción fácil y económica es hacerlos en casa y que los chicos puedan participar de su proceso de fabricación, estimulando su creatividad y sobre todo, compartiendo un momento en familia.

La pascua es una celebración que reúne a toda la familia e invita a los más pequeños del hogar a realizar actividades que pongan a prueba su creatividad e ingenio como jugar a la búsqueda del tesoro, dibujar y colorear los famosos huevos de pascua y planear una divertida carrera con obstáculos, todo hasta lograr desenvolver los deseados huevos de pascua. Para los amantes del chocolate hoy el mercado ofrece numerosas opciones de huevos originales en varios formatos, tamaños y colores.

Sin embargo, actualmente, los huevos de pascuas de diferentes marcas pueden rondar desde los $4000 los 150gr hasta los $14.000 los 225gr, mientras que realizarlo en casa no solo puede abaratar costos sino también fomenta la imaginación y la posibilidad de incluir el juguete sorpresa de su preferencia, creando un regalo especial y diferente adaptado a cada personalidad.

Los chocolates y juguetes integran una combinación tan emocionante como ineludible para los más pequeños, pero crear algo con sus propias manos puede volver esta fiesta aún más divertida. Moldes, chocolates, y demás confites a su gusto son los ingredientes necesarios para crear un huevo de pascua incluso mejor a los que se puedan comprar. Todo lo que debes hacer es

Derretir en baño de maría el chocolate.
Colocar el mismo dentro de los moldes.
Dejarlos reposar boca abajo sobre el papel manteca.
Poner a enfriar en la heladera.
Tomar ambas mitades de los huevos y pasarlos sobre la hornalla para derretir un poco las mitades y poder unirlas.
Antes de unir ambas mitades, es momento de poner el juguete sorpresa.

Crear un huevo de pascua no solo les da la libertad de elegir ingredientes completamente de su gusto, sino también de rellenarlo con su juguete preferido. Ahora se pueden encontrar muchas opciones en jugueterías, dependiendo del tamaño del huevo.

Los juguetes son una fuente de diversión y a su vez estimulan la imaginación y la creatividad de los niños, permitiéndoles experimentar con diferentes situaciones y roles. Además de ayudar a desarrollar habilidades motoras finas y gruesas, así como habilidades sociales y emocionales al enseñarles a compartir, cooperar y comunicarse.

Disfrutar de un huevo de pascua hecho en casa puede ser especialmente beneficioso para toda la familia, esconderlo para que alguien lo encuentre o simplemente jugar con las sorpresas que trae dentro fomenta la unión, la empatía y el compartir. Además de ser una actividad capaz de convertirse en una tradición para crear huevos únicos cada año.