“Estupor del porno” por Eduardo Sanguinetti: Filósofo, poeta y artista argentino

El pansexualismo freudiano ve un atributo sexual en cada forma y en toda relación, una forma subliminada de sexualidad como la política, hoy puede considerarse como un desarrollo de los conflictos de la diferencia, en cada conflicto de identidad y relación.

La cultura de la prostitución y el porno, esta asimilada cual núcleo constitutivo de ser y estar en Argentina y el mundo. Opera bajo diversas formas de sexismo, asimilado al acontecer de la existencia de una comunidad en estado de aparente “celo casual”, basta visualizar los pasquines que ofrecen los kioscos, programas de TV, films producidos por y para el porno directo o metafórico, prostitutas por tendencia ocupando listas de partidos políticos en sitiales de honor, dirigiendo las más diversas empresas, conformadas por capitales fantasmas, sin nada que ofrecer, salvo su cuerpo.

La sexualidad se difunde como estímulo mercantil, como parte activa del gran negocio de activos incorpóreos, representados por los sujetos-objetos, que automatizaron sus relaciones cual máquinas de follar, sin la presencia de Eros, que conservaba y elevaba la vida, como “principio de placer” (Freud dixit).

Bonitas y atractivas mujeres, entregando su cuerpo, para ser consumido y de ese modo lograr arribar a la cima de la pirámide de la “fama y el éxito”, indispensable condición en este planeta, para “pertenecer” al sistema prostibulario, que reina y rige en el mundo. La mediocridad pintada de todos los colores, impuso criterio absoluto en todos los espacios, mujeres objeto, hoy ocupando espacios en la política, en la cultura, siempre con deseo despuntado y “a punto” para exponerse a ser abordadas en su condición de sujetos-objetos… la logística articulada por las corporaciones de medios, con ramificaciones internacionales, que imponen códigos de comportamiento, nunca debajo del nivel de porno política, socialmente aceptada y asimilada a las prácticas de gobiernos en acto de administrar el “Cabaret” en que se ha convertido el planeta.

De esta manera la energía libidinal modifica su función social en la medida que la función sexual está hiperpromocionada y alentada a cualquier costo, incluidos productos de la industria de la droga que hacen follar hasta a una momia, en nombre del Libre Mercado, que Gran Hermano ordena y dispone, pasando a un tercer estadio el “Principio Tecnológico”, donde la libertad sexual es sojuzgada y puesta en beneficio de prácticas de diversión alienantes, humillantes y represivas, para de ese modo llegar a un control más enérgico sobre un individuo anestesiado, sin capacidad ni voluntad de resistencia.

El dinero es la clave de cómo el porno liberado ha impuesto criterio, dándose a la fuga valores tales como “lealtad”, “compromiso”, “ética”, “valentía”, “autodeterminación, “conocimiento”, “responsabilidad”, “voluntad”.
En este teatro “insano” y “obsceno” como altar de iglesia, los actores prostituidos son doblemente benditos, elevados a símbolo de la superficie, del culto y el simulacro, estimulados en saber, como se proclama, que solo somos objetos sexuales… todo asimilado a una frase, que con un sutil toque poético, solía murmurar en mis tránsitos, hace un tiempo: “todo es excusa para el coito, vanidad y correr tras el viento”.

Informantes prostitutas, travestidas de modelos, escritores a la carte, actrices/actores, conductores, historietistas, directores de cine, etc., bajo órdenes estrictas de la corporación mediática que todo lo controla, nos impone una imagen de la realidad al margen del tiempo por el que transitamos, conformando de este modo la matrix que reina en su vacuidad, un vacío radiante.

La ausencia de escrúpulos y la cobardía de que están formados “estos informantes”, nos muestran realidades cocinadas en estudio de TV o en salas de redacción de medios gráficos, desde donde se escribe interlineados de las noticias del día entre las publicidades de productos a vender y opiniones de farándula conformada por una fauna de alcahuetes, putas y pedófilos que ponen en escena la cultura periodística de este tiempo, pobre tiempo, donde el mito del simulacro reina… la realidad virgen y prostituta se presenta como la alternativa y alteridad que debemos optar como espacio de existencia.

Internet y sus redes sociales, amenizan de manera brutal infiltrando repertorios y dando por tierra, en determinadas ocasiones, con la mentira oficial o la fábula del día repetida hasta el cansancio, por los informantes misóginos, mercenarios rentados por administraciones gubernamentales.

Mensajes de Twitter dejan muy bien expuestos los anacronismos entre una posición y una disposición a esconder lo evidente: la mentira de este sistema y sus consecuencias traducidas en juego de zombies, para liberar a los rehenes conformados por toda una sociedad, que se debate entre ser esto o lo otro… la opinión pública manipulada entre la opinión subjetiva de un troll o hacker y la versión oficial siempre paupérrima y mentirosa, en cuanto a manifestarse con espontaneidad y fuera de los lugares comunes que propone el poder prostibulario.

Confunden y engañan al despistado cordero matrix y empantanan con sus materias fecales al pedestal de la verdad. He manifestado y demostrado en infinidad de notas que toda la realidad que crea matrixmedia es falsa. La verdad o el beneficio del ciudadano o algo que no dé dinero o no salga en la televisión no interesan. Nuevas alternativas o información novedosa y revolucionaria sería ante el estado de esta realidad simulada, volver a una wiki-proto, de real sentido, con “música celestial” para esta banda de delincuentes amancebados y bien pagos.

Toda esta mafia conformada por esclavos/as, amigos de politicastros y sus porno stars, hoy en función política de importancia, hora a hora, con pantalla y micrófono, de medio en medio, difaman, insultan, mienten, con magros discursos y sonrisa abierta a la hora de intercambiar los favores sexuales “fáusticos”… desorientan, confunden al ciudadano que aún cree en la presunta verdad de la prensa diaria y los espantosos balbuceos de los devenidos políticos de teatro bufo… ciudadanos anestesiados, plenos de temor y avidez, mentirosos por antonomasia, sin desentonar con los funcionales gobernantes que todo lo malogran, como logística, de las parábolas y catástrofes instaladas.

Los gobiernos y corporaciones de tendencia neoliberal hoy organizan, reprimen, censuran, compran y venden lo que denominan cultura del presente: ideas que devienen en adoptar a presión actitudes y comportamientos, como los sexuales, que se traducen en ideas operacionales, que actúan directamente en una actitud, cual proceso social y político en acto de esclavizar.

A través de signos hiper-evidentes notaremos el fin de la Democracia, devenidos en saber a ciencia cierta, que la Aldea Global es un Negocio de enormes dimensiones, donde las corporaciones en su debe y haber manipulan nuestras existencias instaladas en las otrora repúblicas democráticas: corporaciones-políticas, corporaciones- petroleras,corporaciones-porno, corporaciones-medicinales, corporaciones-armamentísticas, corporaciones-mediáticas, corporaciones-sindicales, corporaciones del espectáculo y demás… ¿Debería poder probar que es cierto?

Con todo, donde todo parece querer decirnos que algo concluye, intuyo que algo comienza. Y donde todo parece querer decirnos que algo comienza, sé que algo continúa… pues una cosa es renunciar a toda ontología esencialista del sujeto social, al asimilarlo a un sistema inestable en el que permanecemos, intentando renunciar al postulado materialista, un mundo pareciera independiente de las representaciones del poder, definiéndolos en términos de proceso y no de sustancia… y no olvidemos que más allá de la desesperación y de la desilusión existen siempre la ausencia de cosas peores.